Hiperlaxitud articular y cansancio: cuando la fatiga no es normal

hiperlaxitud y cansancio

La hiperlaxitud articular y el cansancio persistente son dos síntomas que con frecuencia pasan desapercibidos o se atribuyen a causas inespecíficas. Sin embargo, en muchos pacientes —especialmente mujeres con lipedema— esta combinación tiene una base clínica clara en el tejido conjuntivo.

En Clínica Simarro, nuestra experiencia con casi 1.800 pacientes nos ha permitido identificar un patrón constante: el 97% de las mujeres con lipedema presentan hiperlaxitud ligamentosa.

Este hallazgo, que formará parte de un artículo científico de próxima publicación, refuerza la idea de que el lipedema no es solo una enfermedad del tejido adiposo, sino una patología compleja del tejido conectivo, que afecta también a ligamentos, fascias y tendones.

La hiperlaxitud articular implica que los ligamentos son excesivamente elásticos, lo que otorga mayor movilidad a las articulaciones pero también reduce su capacidad de estabilidad. Como consecuencia, la musculatura debe trabajar de forma constante para suplir esta función, generando fatiga muscular crónica, dolor y agotamiento generalizado.

Hiperlaxitud articular: definición y repercusiones clínicas

La hiperlaxitud ligamentosa es una condición en la que los ligamentos —estructuras que fijan los huesos en las articulaciones— presentan una elasticidad anormalmente alta. Esta característica permite un rango de movimiento mayor al habitual, pero a costa de la estabilidad articular.

El test de Beighton es una de las herramientas más utilizadas para diagnosticarla, aunque su interpretación requiere experiencia clínica. En pacientes con lipedema, esta condición no solo es frecuente, sino que explica muchos de los síntomas musculoesqueléticos asociados:

  • Dolor de rodillas, tobillos o caderas tras caminar.
  • Contracturas y sobrecarga muscular en la zona lumbar.
  • Inestabilidad al caminar o sensación de “fallo” articular.

La hiperlaxitud, por tanto, no es un simple rasgo físico, sino un factor que condiciona la calidad de vida y que debe valorarse en el contexto del lipedema y otras enfermedades del tejido conjuntivo.

Hiperlaxitud y cansancio: el papel de la subinflamación crónica

El cansancio en las pacientes con lipedema no se explica únicamente por la sobrecarga mecánica de músculos y articulaciones. Una parte clave de la fatiga está relacionada con la subinflamación crónica de bajo grado, un proceso mantenido que afecta al metabolismo celular y al sistema inmune.

Este estado inflamatorio suele tener origen en la hiperpermeabilidad intestinal (conocida como “leaky gut”), que permite el paso de moléculas proinflamatorias al torrente sanguíneo. La investigación actual señala que esta inflamación sistémica se refleja en síntomas como:

  • Fatiga persistente no resuelta con el descanso.
  • Dolor difuso en músculos y articulaciones.
  • Mayor susceptibilidad al estrés físico y mental.

En nuestra experiencia, cuando abordamos la subinflamación crónica con dieta y tratamiento específico, las pacientes reportan una mejoría notable no solo en el dolor y la inflamación local, sino también en la sensación de cansancio generalizado.

Cómo diferenciar la hiperlaxitud y cansancio de otras patologías

La combinación de hiperlaxitud ligamentosa y fatiga puede confundirse con otras enfermedades, como:

  • Síndrome de fatiga crónica.
  • Fibromialgia.
  • Trastornos endocrinos como el hipotiroidismo.

La clave está en realizar un diagnóstico clínico completo, que incluya:

  • Evaluación de la movilidad articular y estabilidad.
  • Estudio de la fuerza muscular y la postura.
  • Valoración de marcadores de inflamación y nutrición.
  • Exploración del tejido adiposo y su distribución en extremidades.

Este enfoque integral permite establecer con precisión si el origen de la fatiga está en el tejido conjuntivo alterado por el lipedema.

Tratamiento integral de la hiperlaxitud y cansancio en Clínica Simarro

En Clínica Simarro, tratamos la hiperlaxitud articular y el cansancio desde una perspectiva multidisciplinar:

1. Ejercicio terapéutico específico

Fortalecemos grupos musculares clave que compensan la laxitud ligamentosa. El trabajo de propiocepción, control motor y reeducación postural estabiliza articulaciones inestables y reduce la sobrecarga.

2. Tratamiento de la subinflamación crónica

Nuestros programas nutricionales se centran en dieta antiinflamatoria y de reparación intestinal, en ocasiones de tipo cetogénico adaptado. Esto permite restaurar la barrera intestinal y disminuir la inflamación sistémica, con clara mejoría de la fatiga.

3. Abordaje del dolor y la movilidad

Fisioterapia avanzada, técnicas manuales y tratamientos médicos mínimamente invasivos alivian la sobrecarga articular y mejoran la movilidad diaria.

4. Acompañamiento psicológico

La fatiga crónica y la inestabilidad articular afectan al estado emocional. Por ello, incluimos soporte psicológico para romper el ciclo dolor–cansancio–ansiedad.

Hiperlaxitud y cansancio: una visión desde el tejido conjuntivo

La evidencia y nuestra experiencia clínica confirman que la hiperlaxitud ligamentosa en pacientes con lipedema es la norma y no la excepción. Reconocer esta realidad cambia el enfoque diagnóstico y terapéutico, permitiendo ofrecer soluciones más eficaces y personalizadas.

Si sientes que tu cansancio no se explica por el esfuerzo diario, que tus articulaciones son inestables o que el dolor persiste sin una causa clara, puede que detrás exista una condición del tejido conjuntivo que merece ser atendida.

En Clínica Simarro, te ofrecemos una atención integral que combina ciencia, experiencia y empatía. Agenda tu cita y da el primer paso para recuperar tu energía y bienestar.

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